El yoga es una de las disciplinas que cada día gana más adeptos y esto se explica por los grandes beneficios que aporta su práctica
Los profesores de los estudios YogaOne, lo ven cada día en las clases: «Muchos alumnos comienzan las clases de yoga para mejorar su estado físico, pero además de encontrar esta mejora, ven como el yoga también les aporta serenidad, vitalidad y una agradable sensación de relax«.
El yoga es una disciplina milenaria muy completa y que aporta beneficios tanto a nivel físico, como mental y espiritual. De hecho, los mejores profesores de yoga del mundo, invitados a sesiones especiales y workshops de yoga que ofrece YogaOne de manera regular, aseguran que «el yoga es el camino del equilibrio entre el cuerpo y la mente, y ayuda a redescubrir la felicidad interior, muchas veces olvidada«.
Para descubrir la esencia del yoga irá bien recuperar el significado etimológico de la palabra: yoga en sánscrito significa «unión», una unión que hace referencia a la conexión entre el cuerpo, la mente y el espíritu. Hay que ser conscientes de que, tanto las emociones como los pensamientos afectan al cuerpo y que la eficacia del yoga tiene mucho que ver con este deseo de unir las diferentes partes que nos conforman.
Existen muchos estilos de yoga, pero la práctica de las asanas constituye el grueso de la clase y son las que llegan a transformar el cuerpo y la mente: hay una mejora de la flexibilidad, se incrementa el rango de movimiento de todo el cuerpo, mejora la circulación de la sangre y favorece la eliminación de toxinas. Los beneficios que el yoga aporta son ilimitados, ya que comprenden todo el conjunto del sistema inmunitario, glandular y muscular.
Son muchos los que consideran el yoga una medicina para prevenir y curar muchas enfermedades, ya que las posturas que se realizan llegan a cada rincón del cuerpo oxigenando todas las células.
En el yoga la respiración es otro elemento fundamental, porque constituye el puente para llegar a las emociones y también la base de cada movimiento y postura. Conviene despacio aprender a sincronizar las posturas con la respiración, para que el efecto del yoga se multiplique. Cuando las torsiones y estiramientos de las asanas se combinan bien con la respiración, los órganos internos llegan a disfrutar de los beneficios de un tipo de masaje que les devuelve el equilibrio y los ayuda a eliminar tensiones.
Por otro lado, una parte muy importante del yoga consiste en observar la respiración, lo que, además de favorecer la concentración, permite conectar con el ritmo natural de la persona, que toma conciencia de sí misma y puede serenar la mente.
Un arte al alcance de todos
Otra de las características del yoga es que está al alcance de todos, porque las asanas se pueden adaptar a las posibilidades de cada persona. Hay modalidades de yoga para mujeres embarazadas, para personas mayores… Pero también puede ser una práctica muy exigente añadiendo un grado de dificultad en las posturas.
Un estilo para cada necesidad
En YogaOne encontrarás más de 20 estilos de yoga que puedes consultar en este enlace. Te resumimos a continuación los más destacados.
Hatha: La mayoría de ramas derivan de esta modalidad. Una clase incluye asanas estáticas coordinadas con la respiración, ejercicios de respiración (pranayama) y finaliza con una relajación consciente.
Ashtanga: estilo dinámico de yoga creado por Sri K. Pattabhi Jois en el que las asanas, sincronizadas con la respiración, se enlazan unas con otras formando una vinyasa (secuencia).
Kundalini: la energía Kundalini radica en la base de la columna. El objetivo es despertar esta energía y elevar la conciencia mediante una respiración muy energética, movimientos repetitivos y canto de mantras.
Dharma: modalidad desarrollada por Sri Dharma Mittra (1930) con una línea de trabajo similar al Ashtanga y el Flow Yoga.
Anusara: estilo de yoga basado en cinco principios de alineación que unifica los principios universales de alineamiento con una filosofía tántrica no dual que personifica una celebración del corazón.
Yoguilates: fusión entre el yoga y el Pilates. Trabajo muy completo a nivel de la musculatura profunda y de conciencia corporal.
Iyengar: la práctica de Iyengar se centra en la alineación correcta del cuerpo. Las posturas se mantienen por un tiempo.
D-gravity Yoga: fusión de diferentes técnicas como el Pilates, gimnasia, acrobáticos, danza y yoga que se practica con una hamaca colgada del techo. Se hace ejercicio desafiando la gravedad y buscando la diversión.